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La ruina del sector agrícola no impide la felicidad de los agricultores
Los agricultores somos humildes y felices hasta en situación de ruina. Y esto es así, ya que todos los que somos o llevamos la agricultura en la sangre desde que nacimos y nos enseñamos con la ayuda de nuestros ancestros, somos gente muy humilde.
Esta situación me recuerda a la película de: “En busca de la felicidad” protagonizada por el famoso actor Will Smith, el cual se empeña en conseguir la tan ansiada «Felicidad».
No aceptamos la derrota aun estando casi totalmente derrotados, somos gente luchadora y que, tras una gran ruina en el sector, seguimos trabajando y luchando por la siguiente campaña.
Y verdaderamente cada año es todo un reto para nosotros, ya que tenemos que hacer lo imposible por mejorar la producción, reducir los costes, reducir la mano de obra, etc.
Pero, sin embargo, por mucho esfuerzo que depositemos en ello y por muchas manifestaciones en defensa del sector primario que organicemos, si desde arriba no se nos apoya como debe por malas praxis políticas o por meros intereses globalistas, pues está muy difícil que podamos prosperar.
Factores para que los agricultores estén en ruina
Un agricultor se centra única y exclusivamente en obtener la mayor producción de frutas, verduras y hortalizas, junto con el mayor beneficio de sus campañas, o por lo menos ese es el objetivo.
Campañas que año tras año están siendo desastrosas por culpa de:
- La competencia desleal y sus importaciones internacionales masivas.
- Incorporación de nuevas plagas por falta de controles fitosanitarios adecuados.
- Los altos costes de los productos fitosanitarios, ya sean químicos o ecológicos.
- La subida del precio de los fertilizantes, abonos, combustibles, electricidad, agua.
- No conseguir vender las cosechas por encima del precio de coste de producción.
- Incremento de robos en las explotaciones agrarias, sin consecuencias y sin justicia.
Pues estos son algunos de los problemas que deberían de solucionarse de manera inmediata si queremos que nuestros campos (los campos españoles) perduren y no queden en el olvido.
Conclusión
La agricultura siempre ha sido, es y será algo complejo que solo entenderemos nosotros, los agricultores tradicionales que nos hemos criado literalmente en ella.
Nosotros hemos sido criados con una educación y unos valores de respeto y cultura totalmente diferente a los demás, se nos ha enseñado a valorar muchísimo las cosas desde bien pequeños.
Esto es algo que mucha gente de hoy en día desconoce y que no sabe ni lo que es, por una falta educativa y de valores en sus tiempos más mozos, aunque hay gente para todo.
Pero el respeto y apoyo hacia los agricultores que hoy en día seguimos al pie del cañón, es más bien escaso, es por eso que necesitamos todo el apoyo posible, sea de quien sea.
Necesitamos la unión de todos y cada uno de los españoles para defender nuestros cultivos tradicionales, la forma más natural y honrada de vivir gracias a nuestros antepasados.
Todo esto lo tenemos en cuenta a la hora de votar en las próximas elecciones, ya que por muy analfabetos que podamos parecer, no nos olvidamos de quien o quienes nos quieren hundir.
Y que pese a las dificultades que estamos padeciendo, estamos ahí para producir alimentos para todos y cada uno de los españoles, tanto para los que nos apoyan como para los que nos quieren hundir.
¡¡¡Ahí queda eso!!! Despertad antes de que sea demasiado tarde.